Oscar Muñiz Corro
El Panel Independiente para la Preparación y Respuesta ante una Pandemia, puso en conocimiento su informe final titulado “COVID-19: Que sea la ultima pandemia”.
El grupo encargado de su elaboración fue conformado por la ex presidenta de Liberia Ellen Johnson-Sirleaf y la señora ex primera ministra de Nueva Zelanda Helen Clarck, junto a un grupo de trece miembros. El grupo de trabajo se conformo el pasado septiembre del 2020 bajo instancias de la Asamblea Mundial de la Salud. Su tarea central fue, formular y examinar una respuesta global a la pandemia incluyendo mejoras.
Este informe contiene recomendaciones para la creación de un “nuevo sistema” que coordine las acciones como respuesta, aunque según los entendidos existen muchas ausencias en la estrategia que permita realizar reformas para que los Estados cumplan con las indicaciones sanitarias de urgencia. Caso singular en el informe es la falta de pronunciamiento claro y preciso sobre las fallas de China al inicio de la pandemia lo que facilito la propagación de la pandemia.
Dice Stewart M. Patrick “El informe documenta fallas en cada fase de la respuesta global al COVID-19, que el panel describe con precisión como “la peor crisis socio-económica y de salud combinada que se recuerde” (WPR, Wprld Politics Review).
Queda claro que debido a la incredulidad frente al daño, el mundo no se tomó enserio, hasta el dia de hoy, y mucho menos prepararse en invertir recursos contra la amenaza. “Una vez que ocurrió el brote inicial en Wuhan, los sistemas de vigilancia y alerta no pudieron seguir el ritmo de la propagación del virus. Las autoridades chinas tardaron en reaccionar y la Organización Mundial de la Salud no declaro en emergencia de salud publica de importancia internacional o PHEIC, hasta el 30 de enero, lo que contribuyo a “retrasos, vacilaciones y negociaciones” S.M. Patrick.
En nuestra entrega Frente al COVID-19, proponemos una acción de juicio internacional contra China, algo por lo menos reivindicativo para los deudos.