Si bien es cierto que el Fondo Monetario Internacional (FMI)
es un organismo supranacional dependiente de la ONU, su experiencia lo ha
signado como un “demonio” personificado en su numerosa burocracia, hoy dirigida
por la Sra. Legarde y por sus conocidas “recetas” económicas, que hacen de este organismo la
caja de resonancia del pensamiento económico clásico, hoy llamada corriente
liberal.
Esto último es muy cierto, pues ni siquiera el inefable
Straus Kahn pudo cambiar una sola nota del pentagrama económico de dicho
organismo.
Hoy el FMI sorprende a “tiros y troyanos” con su iniciativa,
recoger ideas sobre el mejor uso de los recursos naturales , como si no tuviera la suficiente ingerencia,
por decir lo menos, suficiente para solicitarla directamente a los gobiernos.
De hecho suponemos que esta iniciativa es de buena voluntad, sin embargo no
deja de llamar la atención semejante pedido.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario